Bienvenidos a mi blog particular donde espero que os sintáis como en casa y donde están guardadas muchas cosas buenas y no sólo la esperanza como en la caja de Pandora.

Disfrutad y pasad un buen rato, espero que después de recorrer mi Caja Particular salgáis sabiendo algo más de mí. Y por supuesto, cualquier opinión es bienvenida.

Saludos, un beso y un fuerte abrazo. Elo.

jueves, 4 de octubre de 2012

La maldición de la Princesa


“¡Por Dios! Este tampoco va a ser ÉL” – pensaba mientras tomaba un café con Alberto. Era un chico agradable, atractivo, inteligente y sensible que me trataba muy bien y con el que me sentía muy cómoda. Todo lo que yo pedía, ¿no?.
Pero hasta ahí llegaba todo. No había Amor. Nunca sería como con Claudio, mi pareja de juventud.
Ya me estaba empezando a desesperar porque Alberto era el último de una lista de romances más o menos intensos y largos que habían pasado por mi vida en los últimos años.
¡Y es que yo quería volverme a enamorar! Sentirme querida, ser importante para alguien y que no me invadiera más este sentimiento de soledad.
¿Es que ya no iba a sentir el mismo amor que me invadió con Claudio?
No lo entendía. Pero si estaba abierta a una nueva relación, a volverme a enamorar…
¿Por qué no aparecía mi hombre perfecto? ¿por qué no aparecía un nuevo amor?
¿Tan difícil era parecerse a Claudio?

2 comentarios:

ericbeat dijo...

¿Encontrar al hombre perfecto? ¿Encontrar a la mujer perfecta? No sé si existe realmente y no sé si es buena idea establecer comparaciones con amores del pasado.

Cada uno es como es y es difícil que haya un "cambio" radical.

De todas formas, no renunciemos a seguir buscando y soñando con nuestro ideal.

Creo que lo merecemos. Besotes.

Anónimo dijo...

Solo se puede volver a amar cuando tu corazón queda libre del pasado, en el sólo hay cabida para uno...